miércoles, diciembre 10, 2008

Los Exitosos Pells

En diversos momentos hemos adherido a ese concepto según el cual las fechas históricas suelen ser arbitrarias, ya que los fenómenos históricos, en verdad, suelen comenzar antes de su inicio formal, y que lo propio suele pasar con su conclusión.




En particular hemos dicho en otro post que el "menemismo" en tanto sistema de valores había comenzado mucho antes de que Menem pudiera soñar con ser siquiera gobernador de La Rioja.




También podemos decir que esa cultura no ha concluido en nuestra sociedad aún a pesar del 2001, fecha que para algunos de los partícipes pudo significar querer acabar con esa época, pero que para algún sector significó un "duelo" por no poder cumplir con el sueño propiciado por Menem.




También dijimos que para quien escribe estas líneas "hablar de uno es hablar de todos (o de todo) y hablar de todos ( o de todo) es hablar de uno


Toda esta introducción viene a propósito de comentar un programa de televisión que parece salir de la medianía reinante.




Se trata de los "Exitosos Pells" una comedia protagonizada por Mike Amigorena, Carla Peterson, Walter Quiroz, Hugo Arana y Mirtha Busnelli entre otros.




En ella la televisión habla de sí misma, pero al hablar de sí, habla de la sociedad, del sistema de valores en definitiva imperante, y sin proponérselo del "menemismo" nunca concluido aunque no se lo hayan propuesto.




¿ De que trata los Exitosos Pells?




El argumento es brevemente el siguiente:




Martín Pells (Mike Amigorena) es el periodista mas exitoso del país.Es engreído, soberbio e inescrupuloso.




En el canal de noticias Mega News conduce un también exitoso noticiero junto a su esposa Sol Casenave (Carla Peterson), que son ante las cámaras un perfecto matrminio de "winners".




Ese matrimonio es en verdad una fachada inventada por Franco (Hugo Arana) el también inescrupuloso dueño del canal con rasgos de "capo mafia", ya que Martín es en verdad homosexual y amante de su hijo Tomás (Diego Ramos), mientras que Sol es la amante del ambicioso Diego Planes (Walter Quiroz), un periodista en ascenso cuyos valores no difieren en absoluto de los del resto de los personajes antes nombrados.




Pells es tentado por Nuñez (Mirtha Busnelli), dueña del canal de la competencia y ex mujer de Franco, para que se pase a sus huestes.




Las exigencias de Martín no son toleradas por Franco quien forcejea con él, y tras una desafortunada caída recibe un mal golpe que lo deja en coma.




Franco manejando atropella a Gonzalo (también Mike Amigorena) quien es un actor desconocido muy parecido físicamente a Pells.




Le propone entonces,tras ofrecerle una suma millonaria, hacerse pasar por Pells para ocultar toda la situación, cosa que acepta para pagar una deuda hipotecaria, y también porque lo tienta protagonizar un gran papel como actor.




Pero Gonzalo, que comienza a trabajar en el canal junto a su amigo Sergio un loser levemente patético que interpreta Mex Urtizberea), comienza a padecer las contradicciones que implican manejarse en un medio tan frívolo e hipócrita cuando sus ideas son justamente las opuestas a las imperantes allí.




Sus ideales enamoran a Sol, apoya a Álvaro un humilde y despreciado trabajador del canal que sin embargo posee brillantes ideas que no han sido reconocidas, dona toda la fortuna de Pells al orfanato donde éste se crió y demuestra una calidad humana absolutamente ajena al ambiente y al verdadero Pells.




Hasta allí el argumento.




Si bien a veces cae en ciertos lugares comunes, no deja de ser interesante esta ficción.






Las panorámicas de Puerto Madero, ese insultante símbolo de ostentación y mal gusto frente al país que sufre y padece, o las tomas del country donde viven los Pells, constituyen toda una metáfora del mundillo de aquellos a los que no les fue nada mal en estos años en los que la mayoría no le fue precisamente bien.




La histeria, el narcisismo reinante, la frivolidad y la crueldad son todos signos de esta decadencia de la que no alcanzamos a salir a pesar del 2001.




La forma también fácil en que se toma y se despide gente, el ejercicio de la arbitrariedad y el capricho en forma obscena. Todo está allí.




Es magistral la frase que pronuncia una de las productoras cuando despide a una circunstancial colaboradora, celosa porque le había gustado a "Nacho", su amante y una suerte de play boy del canal:



"Y ... La televisión es así" En estos años se ha dicho también " No es nada personal, pero la política es así, el mercado es así, etc...". Casualmente quien pronuncia la frase es siempre ajeno a esos avatares.




El Menemismo en tanto farandulización de la vida no ha concluido. Esa farandulización no es ni siquiera la "versión" rosa del Hollywwod tradicional ( o de las malas películas argentinas de otra época).



Es, por el contrario, la reivindicación permanente de la traición en pos del "éxito" y de un malentendido "glamour" que encubre en verdad un apoteótico mal gusto.


Tal vez sea interesante que comencemos a darnos cuenta que espejos como los que nos muestran "Los Existosos Pells" no son precisamente dignos de admiración, así quizás como sociedad podamos comenzar a esbozar un cambio.