lunes, mayo 29, 2006

Los 25 de mayo


"En el mismo Buenos Aires, no faltaron hijos suyos que miraron con tedio nuestra empresa: unos la creían inverificable por el poder de los españoles; otros la graduaban de locura y delirio de cabezas desorganizadas; otros, en fin, y eran los más piadosos, nos miraban con compasión, no dudando que en breves días seríamos víctimas del poder y furor español, en castigo de nuestra rebelión e infidelidad contra el legítimo soberano, dueño y señor de la América y de las vidas y haciendas de todos sus hijos y habitantes, pues hasta estas calidades atribuían al rey en su fanatismo. ¿Será creíble que al fin éstos han salido más bien parados que no pocos de nosotros? Pues así sucedió. No pocos de los que en el año 10 y sus inmediatos eran, o fríos espectadores de aquellos sucesos, o enemigos de aquellas empresas y proyectos de la libertad e independencia, cuando vieron que el fiel de la balanza se inclinaba en favor de ellos, principiaron también a manifestarse patriotas y defensores de la causa y por estos medios han conseguido reportar el fruto de nuestras fatigas, mientras algunos de mis compañeros de aquel tiempo, y las familias de los que han muerto, sufren como yo, no pocas indigencias, en la edad menos a propósito para soportarlas o repararlas con nuestro trabajo persona." (Cornelio Saavedra, relato sobre los sucesos de mayo de 1810)



El 25 de nayo de 1810,lo sabemos desde el Colegio Primario, es la fecha fundacional de la Nación Argentina, aunque en esa fecha no se haya declarado formalmente la Independencia de estas tierras respecto del Reino de España.
Se ha hablado hasta el hartazgo de los relatos escolares de la revista Billiken respecto de ese día, y se ha fustigado el remanido asunto de los "paraguas", como para demostrar la falsedad del relato tradicional.
Nadie se ha planteado, si en verdad, ese relato tradicional, derivado de la Historia de Mitre, a partir de relatos de los propios protagonistas, como Cornelio Saavedra, no implicaba un mito fundacional de nuestra comunidad a imagen y semejanza de la clase dominante a la que Mitre pertenecía, al decir del antropòlog Levi Strauss.
Recientes investigaciones arqueológicas, han arribado a la conclusión, en la mismísima Israel, por ejemplo, que la Biblia es un relato armado por el Rey Josías de Judea, en el siglo VI antes de Cristo, a fin de incitar a los habitantes del Reino de Israel a unírsele y desalojar a los Babilonios que lo ocupaban a propósito de una identidad común.
El historiador Eric Hosbaum sostiene, por ejemplo, que aquello de reivindicar, la creación de un Estado judío en la tierra prometida, para concluir con la diáspora fue una creación del movimiento sionista, avanzado el siglo diecinueve.
Los relatos ingleses, o norteamericanos, sobre la "Revolución Gloriosa", o sobre la "Boston Tea Party", no adolescen de menos falsedades y omisiones que nuestros tradicionales relatos sobre nuestros orígenes como Nación.
Pero lo que aquì interesa, no es tanto lo que sucediò el 25 de mayo de 1810 en sì, sino la reinvenciòn de esa fecha por parte de la elite gobernante en el perìdo de la "Organizaciòn Nacional".
Una serie de símbolos, que ya habían sido creados, son resignificados para crear la definitiva identidad argentina.
¿Cuáles son esos símblos? ¿Qué es lo que se resignificó?.
Veamos:
En ciertos procesos de descolonización, como los que ocurrieron durante el siglo XX, la identidad local, preexistente, se opone a la de la Metrópolis.
Los Argelinos, y los hindúes, por ejemplo, tenían sus propias lenguas, cultura, costumbres y religiones, antes de ser ocupados por Francia y Gran Bretaña respectivamente, y ésto es lo que hacen valer, al momento de luchar por su independencia.
En las colonias de América hispana, o en los mismísimos Estados Unidos, no sucedía lo propio, la nueva identidad se fue creando.
El venezolano Miranda, o su compatriota Simón Bolívar, por ejemplo, pretendían crear una gran Nación que se extendiese desde México hasta Tierra del Fuego.
Esta idea era alentada por Gran Bretaña, enemigo histórico de España, y con intereses en la región.
Eso no pudo ser, por diversos factores, esa aspiración inicial se "balcanizó", también por influjo del imperio británico, y porque las realidades en América eran mas diversas de lo que se podía suponer.
Es difícil de precisar si es que el Río de la Plata poseía una identidad propia en 1810.
A juzgar por los historiadores liberales, esa identidad habría existido desde el momento en que aparecieron "criollos", en estas tierras.
Vicente Fidel López citaba una sublevación de los locales en Santa Fé contra el mismísimo Juan de Garay.
A juzgar por los nacionalistas reaccionarios como Hugo Wast, esa identidad no existía, y fue sólo un invento de la élite "afrancesada" de Buenos Aires, ya que según él, los naturales del Río de la Plata se sentían tan españoles como los peninsulares.
Son ambas, visiones a posteriori, dictadas por diferentes necesidades ideológicas.
La verdad como siempre suele ser mas matizada.
Difícilmente en 1810, existiese una identidad asimilable a lo que hoy llamamos Argentina.
El Virreynato del Río de la Plata era producto de una división administrativa de la corona española, y su creación (antes era la Gobernación del Río de la Plata y pertenecía al Virreynato del Perú), tenía su origen en una razón militar: la fundación de Colonia Do Sacramento por parte de los portugueses frente a Buenos Aires.
Desde el punto de vista económico, el Río de la Plata, poseía para la corona española escasa importancia.
No había aquí piedras preciosas, y el ganado que habían traído los españoles abastecía una economía casi de subsistencia.
Las diferentes corrientes migratorias, en verdad, daban lugar, a sistemas económicos y culturales dispersos.
Los del Norte, con mas presencia de pueblos originarios, se sentían mas próximos al Alto Perú, los de Cuyo mas próximos a Chile.
En Buenos Aires, igualmente, estaba surgiendo una nueva identidad.
El poco control de la corona española en la hoy capital de la República, había dado lugar al surgimiento de una élite que vivía del contrabando, para sortear el monopolio impuesto por España, por lo que existía un incipiente desarrollo capitalista, en medio de una sociedad predominantemente feudal.
Esta nueva élite se componía de algunos que como Saavedra, cuya familia se había establecido en Buenos Aires en 1645, a pesar de haber el nacido, en Potosí, de otros apellidos cuyo origen no era precisamente español, como Belgrano, Castelli, O´Gorman, Thomson, French, Beruti, o de orígen sefaradí ( lo que ya era imposible en España), como Anchorena, Alsogaray, o Alvear.
A su vez, debemos tener en cuenta, que con la invasión Napoleónica quedaron expuestas dos Españas: la liberal de la Junta de Sevilla, y la reaccionaria del Consejo de Regencia, o de Fernando VII.
Los jacobinos de la Revolución de Mayo, obviamente, sólo podían identificarse con la primera.
A fin de concitar la adhesión de muchos españoles, los patriotas, sabemos, juraron fidelidad a Fernando VII, e inclusive, se identificaron con los colores celeste y blanco de la dinastía borbónica.
Para ello, echaron mano, de una vieja teoría, que postulaba, que estas tierras pertenecía a la corona española y no a España.
Esa era en realidad la teoría de la dinastía de los Austrias, anterior a los Borbones.
Los Borbones, desde Carlos III en adelante, ya habían adoptado la teoría del fisco, que distinguía el patrimonio personal del monarca, de aquel del Estado.
Pero en una jugada táctica, los patriotas invocaron a los borbones, con una teoría, que ellos habían dejado de lado.
El himno, sabemos, ya habla del "gran pueeblo argentino", pero a su vez identifica al país como "Provincias Unidas del Sur".
Los criollos, hubiesen deseado tal vez, algo así como un Common Wealth, el mecanismo que había puesto práctica el Imperio Británico con algunas de sus colonias, tras tomar nota de la experiencia de Estados Unidos, pero eso estaba muy lejos de las aspiraciones de España.
Los protagonistas de la "Boston Tea Party", decían: "no taxation without representation", o sea no pagamos impuetos, si no tenemos representantes.
Querían ser británicos de primera, y ante la negativa británica, decidieron ser independientes, y luego, en un largo proceso, fueron creando su identidad.
Algo así sucedió en Argentina. Era imposible ser españoles de primera, y tener lazos comerciales con el Imperio Británico, por lo que había que independizarse.
Luego vendría una larga historia de guerra civil, luchas entre unitarios y federales, hasta arribar al período de organización nacional.
Y ahí, tanto desde el lado de Alberdi, como desde el de Sarmiento, no obstante los enfrentamientos entre ellos, el modelo era Estados Unidos.
No lo fue en cuanto a la industrialización y la distribución de la tierra, si lo fue en el proceso de creación de identidad.
Y los instrumentos para la creación de esa identidad, fueron:
Una Constitución Nacional, con un preámbulo, y muchos artículos, casi calcados de la Norteamericana, la educación, que desde la décda del 80 del siglo antepasado, pasó a ser pública, laica y gratuita, y la "Historia Oficial" de Mitre Y Vicente Fidel Löpez.
A partir de allí, tal como sucede en los textos escolares ingleses y norteamericanos, la Revolcuión de Mayo pasó a ser un movimiento casi hippie, por lo que el Plan de Operaciones de Moreno brillaba por su ausencia, este último y Castelli, entre otros, dejaban de ser jacobinos, y French y Beruti eran inocentes repartidores de escarapelas, y no los líderes de un grupo de civiles armados llamado "los Legionarios del Infierno" que presionaban a los cabildantes y que repartían los cintillos, para que sus francotiradores supiesen, a quien no tendrían que dispararle.
Nuestro himno dice; "Coronados de gloria vivamos, o juremos con gloria morir".
La última vez que escuché cantar estas estrofas con emoción y sentimiento fue el 19 y 20 de diciembre del 2001.
Lo que esos chicos querían decir, resignificando esos versos, era, hay una vida (ho hace falta que sea gloriosa), que merece ser vivida, si no, no vale la pena, a no ser que se luche para conquistar esa vida plena.
Ojalá eso esté presente cada vez que se convoque a la Plaza de Mayo, no sólo, los 25 de mayo.
Porque que tanto el 25 de mayo de 1810, o el de 1973, como en otras ocasiones, que no fueron precisamente en esa fecha, muchos concurrieron, convocados por sus convicciones, a la plaza, para que en la Argentina, no siga muriendo gente de una manera no precisamente "gloriosa", o para que muchos otros argentinos no estén muertos en vida que es lo mismo.
Ese el mandato de mayo, que no se sabe porque, siendo primavera en el Norte y otoño en el Sur, suele ser un mes que ha convocado, en diferentes circunstancias históricas, y en ambos hemisferios, a que las viejas hojas caigan, y a que las nuevas flores nazcan

sábado, mayo 20, 2006

¿Habrá tiempo de revancha?(Sobre la flexibilidad laboral y algunas propuestas del Dr. Recalde)


"La democracia se detiene en las rejas de las fábricas" (Norberto Bobbio)

Estas reflexiones están disparadas por el hecho de revisitar una vieja y nuy buena película Argentina: Se trata de "Tiempo de revancha", un film del año 1981,dirigido por Adolfo Aristarain,con la participaciòn de Federico Luppi, Arturo Maly,Haydee Padilla,Ulises Dumont,Julio De Grazia y Rodolfo Ranni entre otros.
Verla en este momento fue constatar que habìa "envejecido bien".
Temía que no me produjera la misma sensación que la primera vez que la vi.Entonces, en plena dictadura, se trataba de la primer película que "decía algo", sorteando hàbil y sutilmnete la censura.
Hoy vemos una historia apasionante y bien contada,pero lo que me interesa destacar, no son las virtudes narrativas del film, sino el cuadro que pinta de lo que eran las normas que tutelaban los derechos del trabajador entonces, aún a pesar de lo que ya le había quitado la dictadura, y lo que sucedió después de las leyes flexibilizadoras en plena democracia.
El argumento del film es brevemente éste:
Pedro Bengoa (Federico Luppi), es un activista sindical que ha sido despedido de algún trabajo por causas políticas, y que tras pasar por varios empleos precarios que apenas le permitían subsistir, se presenta a trabajar en la "Tulsaco", una empresa petrolera aparentemente poderosa.
Cuando se presenta a la entrevista laboral, simula ser alguien totalmente apolítico, y resignado,por lo que obtiene el puesto.
Al llegar a destino, y debido a su experiencia, lo nombran capataz, y allí se encuentra con un viejo compañero de militancia, Bruno Di Toro (Ulises Dumont),con quien simulan no conocerse.
Di Toro, le dice que el también se ha alejado de las lides gremiales,pero le confiesa un plan que ha urdido para "vengarse" de la empresa, en connivencia con un abogado inescrupuloso llamado Larsen, que luego sabremos, intrepretará Julio de Grazia.
El plan básicamente consistía en lo siguiente:
Di Toro Y Bengoa,provocarían una explosión, y simulando un accidente, el primero fingiría un shock emocional que lo dejaría sin habla,y,con la intervención de Larsen, negociaría con la empresa la entrega de una importante suma de dinero, a cambio de no iniciarle juicio.
El plan se facilitaría,porque todos los refugios y el material de la empresa se hallaban en pésimas y antirreglamentarias condiciones.
Bengoa comprobaba con indignación que cotidianamente morían operarios a causa de accidentes de trabajo, por lo que le da a Di Toro, el consentimiento para llevar a cabo el plan.
Entonces, ambos producen la explosión convenida,pero algo sale mal : Di Toro muere en el "accidente",y Bengoa queda con vida, por lo que decide tomar el lugar del primero y llevar el sólo a cabo el plan urdido entre ambos.
Finge Bengoa entonces haberse quedado mudo,y por consejo de su abogado Larsen, hace de cuenta que está sólo y que no ha contratado los servicios de ningún letrado.
La empresa le contrata un hotel, lo trata "amistosamente",y se hace cargo de todos los gastos.
El abogado de la Empresa el Dr. García Brown (Arturo Maly), le pregunta al Gerente de Personal (Rodolfo Ranni), si Bengoa tenía abogado. Cuando este último le contesta negativamente, el primero lo festeja diciendo :"Te felicito por contratar opas", a lo que agrega la propuesta de ofrecimiento que ve factible.
Dice que de acuerdo a la Ley de accidentes de trabajo, lo mas aproximado a la pérdida del habla es el 42% de incapacidad, que se establece para los casos de sordera.
Cuando estaban convencidos del arreglo barato y conveniente que iban a hacer los gerentes de la Tulsaco aparece en escena el Dr. Larsen y amenaza accionar por el artículo 1113 del Código Civil, que no fija un tope indemnizatorio, ya que el monto será el que determine el juez.
Aquí nos detemos para analizar este punto que es el que interesa en este artículo.
La película como dijimos se sitúa en 1981. ¿Cuáles eran las normas que regían entonces la situación planteada por el film ? ¿Cual era la responsabilidad que se le podía adjudicar a la empresa?.
En el derecho civil liberal, inspirado en el Código Napoleónico, sólo se admitía la responsabilidad del sujeto a título de dolo (intención), o culpa (negligencia, impericia, etc).
Cuando la revolución industrial va avanzando, se advierte un nuevo fenómeno, la generalización de los accidentes, no sólo en el campo laboral, sino a raíz de la utilización de maquinaria potencialmente riesgosa, como los ferrocarriles o los automóviles por solo citar dos ejemplos.
Algunos juristas empiezan entonces a acudir a una vieja figura extraída del derecho romano, la "responsabilidad objetiva", fundada en el "riesgo" de la cosa.
Esto quiere decir, que el propietario de cosas potencialmente riesgosas, se veía, en el caso de producirse un daño, obligado a indemnizar a la víctima, en razón de ese riesgo, y aún en el caso en que no existiese siquiera culpa de su parte.
Sólo había que acreditar la relación de causalidad entre el daño producido, y el hecho dañoso.
En nuestro país, esto dio lugar a la sanción de la primer ley de accidentes de trabajo, a principio del siglo XX, la ley Nº9688.
Esta ley ya poseía un origen transaccional.Se lo relevaba al trabajador de acreditar diversas circunstancias, pero eso daba lugar a una indemnización "tarifada", o sea con porcentajes calculados conforme a la incapacidad sobreviniente.
Esta ley fue sucesivamente modificada,con la introducción de diferentes conceptos, y con la generalización del concepto de riesgo, que ya no sería el riesgo de la cosa, sino que incorporaría el llamado "riesgo de empresa".
Esto, por ejemplo, permitía introducir la figura del "accidente in itínere" (en el traslado del empleo al hogar, o viceversa), o las "enfermedades profesionales", por lo que no se indemnizaba ya simplemente el daño producido por un hecho traumático, sino también el que producía el desempeño normal de la actividad.
Este campo, el de las enfermedades profesionales, era introducido por la jurisprudencia, junto con otro concepto la "indiferencia de la concausa", que significaba que no importaba que un trabajador ya padeciese determinada dolencia antes de incorporarse a un trabajo, porque el agravamiento de la dolencia en razón del desempeño laboral,daba lugar igualmente a indemnización.
En 1968, Guillermo Borda, ministro de Justicia del dictador Onganía, que era un activo militante de la derecha católca, introduce, sin embargo, una serie de modificaciones en el Código Civil, que limitan su concepción individualista y liberal, en favor del avance de los tiempos.
Entre esas modificaciones se encontraba la del artículo 1113.
Allí el Código Civil admite definitivamente el criterio de la responsabilidad objetiva.Según el texto reformado, y vigente aún en todos los supuestos menos en los laborales como veremos,sólo se excluía la responsabilidad del "dueño de la cosa", en tres supuestos:
a)Culpa de la víctima,b)Fuerza mayor,y c)hecho de un tercero.
A partir de allí al trabajador, le quedaban entonces, dos vías de reclamo:
La de la ley de accidentes de trabajo, o la del artículo 1113 del Código Civil.
En el segundo de los supuestos, la prueba debía ser mas exhaustiva, pero la idemnización, no estaba tarifada, no tenía tope, la determinaba el Juez.
El fuero que entendía en un caso y en el otro, era el laboral, porque cada fuero aplica el derecho en general, cuando es competente, y no una parte del derecho.
De éstas herramientas legales disponía nuestro héroe Bengoa en 1981 en plena dictadura militar ¿Qué pasó después?
La historia es conocida pero vale la pena reseñarla.
Cuando cayó la dictadura. hubo un primer Presidente. elegido constitucionalmenete llamado Raúl Alfonsín, que reinstauró la vigencia de los Convenios Colectivos de Trabajo.No obstante ello, convocó un día a la Plaza de Mayo, para anunciar la "economía de guerra", y desde allí entre otros conceptos, comenzó a familiarizar a la opnión pública con la llamada "flexibilidad laboral".
Nombró entonces, para ese cometido, a un funcionario, que había llevado a cabo la tan mentada "flexibilidad laboral" asesorando a Felipe González en España, llamado Caro Figueroa.
Luego vino Carlos Menem, que llevó adelante el proyecto de conculcación de los derechos laborales mas grande de la historia,el que no pudieron llevar a cabo con el poder absoluto del que gozaban todas y cada una de las dictaduras militares.
El inicio del proyecto de flexibilidad laboral (se trataba de flexibilizar un derecho laboral flexible desde el comienzo, lo que será materia de otra nota), fue la llamada "Ley de Empleo" Nº24013, que incluyó entre otras figuras contractuales, alguna como la que desató la rebelión en Francia hace algunos días, en nuestro caso sin atisbo de reacción de parte de nuestro pueblo.
Esa Ley de empleo fue acompañda por una reforma de la Ley de Accidentes de Trabajo Nº 24028.
En esta nueva ley se eliminaba la "indiferencia de la concausa", sa ponía un tope exigüo a la vida humana. y se bajaban sensiblemente todos los montos indemnizatorios.
En el tema que estamos comentando,se obligó al trabajador a intentar el reclamo por la vía del artículo 1113 del Código Civil, ante el fuero civil, y no ante el fuero laboral como había sido hasta entonces, confiando en que el criterio del fuero civil no iba a ser tan "pro operario", como el del segundo.
Pero los reformadores se llevaron una sorpresa.
Mientras las presiones sobre el fuero del trabajo iban redundando en una jurisprudencia que le daba cada vez menos la razón al trabajador, el fuero civil se mostraba proclive a darle la razón a los operarios que intentaban la vía del artículo 1113 del Código Civil.
Entonces vino la hoy vigente Ley de Riesgos del Trabajo Nº24557, que transformó en prácticamente imposible para el trabajador, el reclamo por accidente de trabajo o enfermedades laborales.
En cuanto a las enfermedades laborales creó una amena "tablita", un "baremo", conteniendo todas las patologías laborales. Fuera de ese baremo, nada se puede reclamar.
Este mismo sistema sólo existe en Chile y España. Advinen quien pudo haberlo sugerido.
¡Sí, Armando Caro Figueroa, entonces Ministro de Menem!, luego diputado Cavallista, antes exiliado. O sea todo un técnico "orgánico" al sistema (como diría Gramsci, lo de intelectual orgánico, no se si será demasiado pretensioso).
Pero en el tema que nos interesa ¿Qué sucedió?.
Se le prohibió lisa y llanamente al trabajador reclamar por la vía del artículo 1113 sel Código Civil, o sea se violó la constitución, y se le impidió realizar lo que desde la dictadura de Onganía le permitían, en tanto persona y no en tanto trabajador.
¿Qué habría tenido que hacer nuestro héroe Bengoa en nuestro tiempo para consumar su venganza?
La única coartada posible, era simular que había renunciado a la empresa cinco minutos antes, así podía reclamarle a la Tulsaco como cualquier particular damnificado,y no como trabajador,ya que en este último caso, lo único que le quedaba era cursar su reclamo através de la ART,y percibir un exigüo monto.
Eso si tenía suerte, porque en una de esas, no reconocían su "mudez" como producto del accidente de trabajo, sino como una patología, que en razón de no encontrarse en el "baremo", no podría ser reconocida.
En medio de todo este cuadro de situación, el Dr. Héctor Reclade, uno de los laboralistas mas reconocidos del país, y hoy diputado nacional, tradicionalmente vinculado a la C.G.T.,produjo dos hechos significativos en el útlimo tiempo.
Por un lado, emitir una nota, mediante la que solicita que no se le reconozca la personería gremial a la C.T.A.
Por el otro, aunció que en contra de la flexibilidad laboral, se volviera a reconocer que el mìnimo de la indemnizaciòn por despido era de dos meses(cosa que había sido derogada en la época de Erman González).
Cuando en un programa televisivo, recientemente, se le preguntó si propondría derogar la L.R.T.,no quiso emitir opinión.
No es que lo que propone Recalde no se deba hacer, pero si se dice pro trabajador, y parte de un gobierno progresista, es mucho mas vasto lo que se debe derogar para volver aunque mas no fuera a la situación de la dictadura militar.
No hay que olvidar, que la fuerza de trabajo estable y "en blanco", es hoy una parte minoritaria de la fuerza laboral.
No abordar el tema de los precarizados, y de los desempleados, hoy en día, es casi como no tratar el problema.
No derogar la infame e inconstitucional L.R.T. es casi como no hacer nada en contra de los años 90, mas allá de denostarlos verbalmente.Ojalá que el silencio del Dr. Recalde en ese programa de televisiòn, no signifique que no va a proponer la derogación de esa anti-ley.
En cuanto a "Tiempo de Revancha", no les voy a contar el final.A los que no la hayan visto es preferible que la vean.
La otra película, la de nuestras vidas, y la de los trabajadores, tiene final abierto
¿Llegará para nosotros algún tiempo de revancha?

sábado, mayo 13, 2006

El Norte, el Sur,la bikini, la belleza,y los tigres de papel (sobre la irrupción de Evangelina Carrozo en la Cumbre de VIena)

Cuando nos dimos cuenta que la Revolución tenía unas hermosas piernas, le pusimos una minifalda para que las luzca (Omar Cabezas, refiriéndose a la Revolución Sandinista).
Una mujer desnuda y en lo oscuro genera una luz propia... (Mario Benedetti)



La noticia la conocemos todos.La jóven reina del carnaval de Gualeguaychú,Evangelina Carrozo, consiguió colarse y exhirse en bikini ante los Jefes de Estado de la Unión Europea, América Latina,y el Caribe,en la cumbre que se estaba celebrando en Viena, y con eso llamó la atención del mundo sobre el tema de la contaminación del Río Uruguay por parte de las papeleras Botnia y Emce.
Es que en verdad, si observamos nuestra cultura, la visión de la Historia que tenemos ha sido siempre eurocéntrica.
En el siglo XX diremos que al "eurocentrismo" se sumó el "yankycentrismo", con lo que siempre que cualquier otra parte del planeta llama la atención de los países desarrollados, lo es en función de los intereses de éstos, y no al revés.
Pero ilustremos un poco ésto con algo de historia y de anécdotas ¿Qué era el Sur para el Norte,y qué fue siendo en cada momento?
En 1968 los Beatles hicieron una película de dibujos animados llamada el Submarino Amarillo que tenía a sus caricaturas por protagonistas. El argumento esquemático y simple consistía en una lucha entre buenos y malos: Del lado de los buenos están por supuesto los mismos Beatles.Cuando los malos son finalmente derrotados su Jefe le dice a su asistente "Y ahora adónde nos vamos?", a lo que éste le responde "¿A la Argentina?".
No estamos hablando de tiempos tan lejanos, pero aún para el ex Imperio Británico,hace no tanto tiempo, y a pesar de haberse valido y sacado provecho de este país durante un largo tiempo, la Argentina era un lugar distante y exótico.
Hasta el siglo XIX poco se sabía de las ex colonias fundamentalmente españolas en América. Sólo los relatos de viajeros como Darwin, o Humboldt acercaban algo de información.
Es que los ojos que observan y juzgan son siempre los del Norte, y nosotros, los del Sur, siempre queremos ser visibles para esos ojos,porque así nos formaron, y porque sentimos que si eso no sucede, nosotros no existimos.
Los únicos pueblos europeos que tenían información respecto de estas tierras a principio del siglo XX eran el español, el italiano, y el portugués en lo que respecta a Brasil por un tema migratorio, y porque todavía, en muchos casos, una parte de cada familia estaba a cada lado del Océano Atlántico.
En la cultura popular la información respecto de estos lugares del mundo era nula, o casi nula en el norte.
Sólo algunos artistas y deportistas destacados fueron llevándole al norte alguna información respecto de estas tierras, pero limitado a su actividad y biografía.
En una novela de principio del siglo XX llamada "El Corazón de las Tinieblas" (que Francis Ford Coppola adaptara a Vietman para su película Apocalipsis Ahora), del "polaco-inglés" Joseph Conrad,el personaje principal se internaba en Äfrica, por ese atractivo que provocaba justamente "la oscuridad","lo desconocido","el horror",y lo que no dice Conrad,pero si diría Freud "el inconciente".
Por eso para los gringos, estas siempre fueron aquellas tierras, en las que se podía comer la fruta prohibida que le era negada en el norte, eran las tierras donde habitaba su propio inconciente.
Será por eso que lo primero que se conoció a nivel masivo de esta parte del mundo,en el gran país del Norte fue Carmen Miranda,una brasileña estereotipada y sensual que cantaba y bailaba,sonriendo, con frutas en la cabeza y "ligera de ropas" para los cánones de la época.
Miranda había en verdad nacido en Portugal,y se había criado en Río de Janeiro, por lo que era una falsa bahiana y en alguna medida una falsa brasileña, pero eso a los norteamericanos no parecía importarles demasiado.
De la Argentina, al Norte siempre le atrajeron las historias del "Che" y "Evita".
No hay duda que las bellas facciones de ambos hacían su parte,y eso era lo primero que les llamaba la atención, para que detrás tuviese alguna oportunidad de ser escuchada la belleza de las causas que defendían,contra lo horrible y siniestro de la injusticia social, que a ambos indignaba,aunque la hubiesen enfrentado de diferentes formas.
El periodista del New Tork Times Herbert Matthews,sabía seguramente lo que iba a "vender" en su país cuando fue a buscar el Che en Sierra Maestra.Detrás de eso vinieron las cámaras de la televisión norteamericana,(todavía no se sabía que los guerrilleros cubanos iban a adoptar el camino marxista), y eso indudablemente fue un factor que contribuyó al triunfo de la Revolución Cubana.No por nada dos célebres y pacíficos secuestros del Movimiento 26 de Julio, tuvieron por "víctimas" a dos celebridades de la época: Pepe Biondi,y Juan Manuel Fangio, concientes del impacto "mediático" que provocarían.
Desde los tiempos de la "Aldea Global", desde que internet aceleró y multiplicó las comunicaciones, los métodos de lucha de cualquier organización deben ser mas y mas creativos,porque existir es existir en los "medios", y los medios, se sabe, son del Norte.
La estética ocupa en todo ésto un lugar no menor.
El atentado a las Torres Gemelas, parecía el guión de una película de "cine catástrofe", jamás imaginada.
El bello cuerpo de Evangelina,la audacia y la creatividad que demostró no sólo ella, sino también los que planificaron la acción le dio el derecho de hablar de aquello que afecta a toda su comunidad, y alteró de manera drástica la agenda de una Cumbre de Jefes de Estado,colocando en primer término a aquello que el Sur, o una parte del Sur, le quería decir al Norte.
Ese fue un instante mágico en que quedó el poder a la altura de un "tigre de papel" como solía repetir Mao Tse Tung.
La acción no escandaliza (los tiempos han cambiado), pero sorprende.
Y así Blair aparece como un gringo desesperado al ver un bello cuerpo de mujer latina,Tabaré Y Kirchner sonríen nerviosamente,la premier finlandesa mira con notoria cara de desagrado, Evo Morales observa con el imperturbable gesto de un aymará,Chavez reacciona con picardía mulata, y hasta le arranca una carcajada a la sobria y afrancesada Presidente de Chile Michelle Bachellet,Fox sonríe con gesto de galán ridículo de los años 40, y por un instante recuerda a algún mal actor del estilo de Fernando Syro.
En fin, todos quedan descolocados, y el agente de Seguridad retira a la muchacha amablemente tomándola de la cintura.
El objetivo estaba cumplido, y los reportajes a la muchacha y a la colaboradora de Green peace comienzan a llover y las dos mujeres no se cansan de informar lo que sucede en Gualeguaychú al mundo entero, Kirchner recuerda al resto de los mandatarios, que el trabajo que el Sur necesita no se puede lograr al precio de asesinar al medio ambiente.
Los del Norte hablan preocupados por las fuentes de energía y los recursos naturales.
Por eso Evo y su "chompa",(otro detalle disruptivo de la imágen),también concitan la atención.
Rápido de reflejos, el Ministro de Vivenda del Uruguay, y ex Intendente de Montevideo, Mariano Arana, celebra la acción llevada a cabo con "picardía rioplantense", y lo contrapone a los "agresivos" cortes de ruta.
Pero a no engañarse.
Lo de Evangelina sería sólo una anécdota, si no hubiese estado precedida por la creativa y persistente movilización del pueblo de Gualeguaychú de la que ella formó parte participando de cada una de las Asambleas.
Su bello cuerpo se formó probablemente nadando en el río que las pasteras vienen a contaminar. Y si las pasteras contaminan, ni ella ni nadie podrán reinar sobre el carnaval, sencillamente porque ya no existirá.
El cuerpo de Evangelina se muestra pero no se entrega, su cuerpo es poder,los cuerpos de los vecinos de Gualeguaychú ocupando el espacio que no quieren perder también son poder.
Y la belleza, no la falsa belleza, la de las comedias baratas o de las modelos tontas.
La belleza,insisto, es por supuesto un valor más a defender.

miércoles, mayo 10, 2006

Comentario de un lector uruguayo

Querido hermano argentino. Estoy de acuerdo en casi todo lo que has
escrito sobre mi país. Casi toda la información es bastante correcta,
salvo algunos detalles de la interna frenteamplista en los cuales tengo
algunas pequeñas diferencias; matices que no hacen a la cuestión central
que tú planteas y que tiene que ver con el rumbo que toma el gobierno y
que afectará la vida de ambos pueblos, sin lugar a dudas, porque si
Uruguay se aleja del Mercosur el bloque se debilitará políticamente,
precisamente en un momento en el cual la estrategia geopolítica del imperio
apunta al corazón de Argentina y de Brasil, países que conforman la
columna vertebral del bloque.

En el actual contexto no es fácil contestar la pregunta de Jaime Roos,
porque a esta altura la mayoría de los ciudadanos de a pie ignoramos
adónde iremos a parar de la mano de este gobierno. Pero como el último
viraje del presidente Vázquez está muy relacionado con el conflicto por
las llamadas papeleras (mejor sería llamarlas pasteras porque no
producirán papel sino celulosa, es decir, una pasta que puede servir para
fabricar papel pero a la cual mayoritariamente se le da otros destinos como
la elaboración de cartón y celuloides suntuarios) copio a continuación
un jugoso artículo del periodista Walter Falco, que aporta una visión
uruguaya diferente a la oficial, que yo comparto en términos generales,
y que demuestra cuán cercanos estamos los uruguayos de los argentinos,
a pesar de lo lejos que estén de nosotros nuestros gobiernos.
------------------------------------------------------------------------------

Plantas asesinas, compañeros entrampados

Quienes hoy toman decisiones que afectan la vida de los pueblos quizás
lleguen a ser juzgados –en el futuro– por algún prestigioso tribunal
como criminales de lesa naturaleza por el delito de ecocidio. Por ahora
están a salvo pues aún no se ha establecido una normativa internacional
que castigue a quienes, actuando como gobernantes, cometen tales
delitos. Porque lamentablemente es lo que nuestro gobierno hace al permitir
la instalación de plantas de celulosa sin exigir el uso de la tecnología
que, en el proceso de fabricación de la pasta, garantiza un nivel menor
de contaminación, esto es, la llamada TCF (Totalmente Libre de Cloro),
dado que es una técnica de ciclo cerrado, casi sin efluentes líquidos.

A pesar de los enormes riesgos que implica y que el uso de la TCF no
garantiza que no exista contaminación y que ésta se producirá de
cualquier modo, debido principalmente al gigantesco volumen de sustancias
tóxicas que serán vertidas al medio, al agua, a la tierra y al aire como
resultado de un proceso industrial a gran escala, la exigencia de su
aplicación sería una forma menos ominosa de soportar la imposición de estas
plantas cuya instalación traerá al país muchos más perjuicios que
beneficios.

Hay dos aspectos centrales en el debate sobre la instalación de las
celulósicas Botnia y Ence (es un error llamarlas papeleras porque no
producirán papel sino pasta de celulosa para exportar y para otros usos, de
modo que quienes argumentan sobre la fatal necesidad de fabricar papel
orinan fuera del tarro, algunos por ignorancia, otros a propósito) y
que son, a saber: la creación de fuentes de trabajo y el grado de
contaminación que provocarán estas industrias.

Respecto de este último punto es evidente que se le ha ocultado
información a la opinión pública, tanto desde las empresas como desde el
gobierno y desde los organismos internacionales. Resulta triste comprobar
como nuestros gobernantes y algunos compañeros, cuando la prensa los
consulta, argumentan que “si el informe del Banco Mundial dice que no habrá
contaminación...”.

¿Es que ahora los informes del Banco Mundial son confiables?, cuando
toda la vida esa institución se ha caracterizado por invertir millones de
dólares en informes técnicos cuyos resultados han sido,
invariablemente, favorecer a las grandes empresas transnacionales en perjuicio de las
pequeñas empresas nacionales, favorecer a los países ricos en contra de
los países pobres y dentro de estos, favorecer a las clases ricas en
perjuicio de las clases pobres. El eterno discurso del Banco Mundial -así
como de otros organismos financieros internacionales similares- es:
“hacemos lo que hacemos para favorecer a los pobres”, y el eterno
resultado de las acciones de esa entidad es que los países pobres como el
nuestro y a su vez los pobres dentro de cada país son los eternamente
perjudicados. ¿Por qué razón tenemos que confiar ahora en los informes del
Banco Mundial cuando siempre nos han jodido?

Pero lo que parece el colmo de la ingenuidad o de la desvergüenza -vaya
uno a saber- es que nadie parece darse cuenta de que era absolutamente
lógico que el Banco Mundial aprobara el préstamo, porque prestar plata
a interés es una de las actividades principales de un banco y para que
la operación financiera se concretara era condición indispensable que
el informe ambiental fuera favorable a las plantas. La desfachatez, el
caradurismo, de estas personas no tiene límites: con un cinismo a toda
prueba le pusieron el pomposo título de ombudsman (defensor del pueblo)
a la persona que dirigía esta operación financiada por el Banco Mundial
para engañar incautos. Y lo triste es que hasta el momento no se han
escuchado voces que cuestionen semejante engañifa. Peor: para oprobio del
pueblo frenteamplista sus dirigentes manejan ese informe como si fuese
una verdad revelada.

(El Grupo Guayubira –que cuestiona la instalación de las plantas–
sostiene que el informe de la ombudsman confirma sus denuncias en lo
referente a la insuficiencia de las evaluaciones de impacto ambiental (EIAs)
realizadas por las empresas y aprobadas por el Ministerio de Vivienda,
Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA); en cuanto a la falta
de controles adecuados por parte del gobierno y en lo concerniente a la
inexistencia de evaluación de los impactos sobre diversos sectores
económicos, en particular la agricultura, la pesca y el turismo, así como
sobre las poblaciones, los sectores sociales y los individuos
potencialmente afectados. Para mayor información consultar href="http://www.guayubira.org.uy/celulosa/Confirman_impactos.html">http://www.guayubira.org.uy/celulosa/Confirman_impactos.html)

Sin plantas no había negocio, con plantas, en cambio, se generaba otro
buen negocio para el Banco Mundial, un negocio que para colmo de males
vamos a tener que terminar pagando de nuestro propio lomo. Porque, por
si usted no lo sabe, amigo lector, la empresa Botnia anunció que, en
realidad, no tiene la plata que antes dijo tener y que no puede invertir
lo que anunció que iba a invertir, y por eso le pidió prestado al Banco
Mundial, pero no sólo, también le pidió plata al gobierno uruguayo y
este ya le concedió varios privilegios, entre otros una generosa exención
de impuestos (la superficie donde se construye la planta y el puerto se
han convertido en zona franca, entre otras prebendas). Esa es plata que
vamos a tener que poner de nuestro bolsillo todos los uruguayos. De
modo que argumentar sobre la base de un informe técnico viciado de
nulidad, flechado y éticamente inadmisible por la conjunción de intereses, es
una reverenda tontería, sino algo aun más grave.

Y lo que no dice ese informe, ni ninguno de los que se han elaborado
hasta el momento, es que la contaminación que provocarán Botnia y Ence
será realmente grave y perjudicial. En particular porque se utilizará la
tecnología ECF (que significa Parcialmente Libre de Cloro o Libre de
Cloro Elemental según sus siglas en inglés). Es una tecnología que tiene
unos 15 años de atraso respecto del sistema TCF y cuyo uso está
seriamente cuestionado, restringido y controlado en los países desarrollados.
Incluso hasta la modesta Fanapel tiene planeado reconvertirse al TCF,
pues es un método de procesamiento que minimiza los riesgos y reduce los
daños ambientales, que suelen ser inevitables en este tipo de
industria.

Uno se pregunta si una pequeña industria nacional, como Fanapel, que en
Juan Lacaze produce entre 30 mil y 35 mil toneladas anuales de pasta de
papel, es capaz de reconvertirse y usar el TCF, por qué no pueden
hacerlo estos monstruos transnacionales que prevén una producción
gigantesca, 50 veces mayor: un millón de toneladas anuales Botnia y medio millón
Ence.
Las razones parecen claras: el sistema ECF es sensiblemente más barato
que el TCF y el gobierno uruguayo no se ha tomado la molestia de exigir
que se aplique este último, cosa que debería hacer como condición
mínima previa a la instalación de estas plantas

Actualmente sólo hay dos plantas en el mundo que producen un millón de
toneladas y no están en España ni en Finlandia sino en China y Brasil.
La instalación de estas plantas en Uruguay, que juntas se convertirán
en el mayor productor mundial de celulosa con un millón y medio de
toneladas anuales, forma parte de un vasto plan de los países del Norte para
trasladar gran parte de la industria altamente tóxica a los territorios
de los países subdesarrollados. Una estrategia que cumple varios
objetivos, entre ellos: alejar de los países centrales el peligro de la
contaminación -que se envenenen los pobres- pues en la mayoría de los países
pobres no hay conciencia ecológica desarrollada ni medios adecuados
para controlar a las industrias contaminantes; y producir con costos
sensiblemente inferiores: privilegios impositivos, exenciones tributarias,
materia prima y mano de obra baratas. En esa estrategia se inscribe la
imposición de un modelo forestal basado en el monocultivo de especies de
crecimiento rápido en la mayoría de los países subdesarrollados.

Por otra parte, los que defienden la instalación de las celulósicas
sostienen que son positivas porque van a generar fuentes de trabajo. Nada
más falso. Es cierto que, parcialmente, durante dos o tres años,
mientras dure la construcción de las plantas, se van a crear algunos puestos
de trabajo en la construcción y en las industrias y servicios
complementarios, pero eso es pan para hoy y hambre para mañana.

En realidad la planta de Botnia sólo ocupará a unas 300 personas, la
mayoría de los cuales serán técnicos y un alto porcentaje extranjeros.
Sólo habrá unos pocos lugares para operarios altamente especializados y
sólo habrá ocho puestos de trabajo para personas de educación media
hacia abajo. De modo que los famosos puestos de trabajo para los
fraybentinos quedarán en la nada: ni pensar que se genere algún empleo para algún
uruguayo de otras latitudes, salvo que sea algún técnico o profesional
especialmente preparado para trabajar en la industria y que tenga una
suerte similar a la de ganar el Cinco de Oro, porque los empleos si los
hubiere serán bien poquitos.

Pero lo más grave es que la cantidad de puestos de trabajo que esta
industria va a destruir será sensiblemente mayor a los que va a crear. Se
perderán cientos de empleos en la agropecuaria, en la agricultura, en
la apicultura, en la pesca, en la hotelería y en el turismo, entre otras
áreas importantes de la economía, no sólo de los fraybentinos sino de
todo el país.

Está comprobado que, de todas las actividades económicas en el medio
rural, la forestal es la que emplea menor mano de obra, menos incluso que
la ganadería extensiva, actividad que tenía el peor índice del país
antes de que se iniciara la forestación. Un solo ejemplo: diez mil
hectáreas forestadas dan empleo, en promedio, a 45 personas. En igual
superficie la horticultura (actividad que está en la mitad de la tabla del
ranqueo en lo que a generación de fuentes de trabajo refiere) proporciona
1330 empleos, es decir, treinta veces más que la forestación.

(De acuerdo con los datos del censo agropecuario del 2000 el número de
trabajadores permanentes por cada mil hectáreas forestadas es de 4,49.
La ganadería de vacunos de carne genera 5,84 empleos permanentes en la
misma extensión de tierra, en tanto que la ganadería de ovinos provee
9,18 empleos. Y éstas, junto con la producción de arroz (7,75), son las
peores cifras. En el extremo opuesto se encuentran la producción para
autoconsumo (262 empleos/mil hectáreas), de aves (211), la viticultura
(165), la horticultura (133) y la producción de cerdos (12src="http://bloggy.com.ar/images/emotions/png/cool.png" border="0"
alt="Cool" />, en tanto que en el medio se ubican la producción de vacunos de
leche (22), los servicios de maquinaria (20) y los cultivos cerealeros e
industriales (10).

Además, los empleos forestales son los de peor calidad, condición y
remuneración, al punto que han sido calificados como trabajo esclavo. La
experiencia de la forestación en los últimos veinte años revela que esta
industria ha destruido los ecosistemas, ha desertificado las tierras
fértiles aptas para la ganadería y la agricultura, ha expulsado a los
colonos de sus tierras y ha destruido cientos de puestos de trabajo en
diversas áreas, empobreciendo al país y sus posibilidades de futuro.

(En los departamentos de Tacuarembó y Rivera, al norte del país,
decenas de colonos que arrendaban parcelas para diversos cultivos –en la
mayoría de los casos en régimen de huerta familiar– fueron expulsados de
sus tierras por los propietarios para destinarlas a plantar eucaliptos o
venderlas a transnacionales de la forestación. En aquellos lugares
donde antes se concentraban hasta 200 personas ocupadas ahora basta con
cuatro peones para vigilar grandes extensiones de campo forestado. Una
serie de notas del periodista e investigador social Víctor Bachetta,
publicadas por el diario La República entre febrero y mayo de 2005, ilustra
ese proceso con mayor detalle y claridad.)

Sin embargo, hay quienes no se resignan a perder lo invertido en
forestación y a costa del sufrimiento del resto del país y del alto riesgo de
un gravísimo deterioro ambiental, presionan al gobierno para que
convierta a Uruguay en un país forestal, es decir, que deje de ser el
“Uruguay Natural” cuya imagen se ha promovido en forma publicitaria y pase a
ser una especie de republiqueta bananera de las transnacionales
forestales.

Los perjuicios para el país serán enormes, en particular para el propio
departamento de Río Negro, cuyo balneario Las Cañas, uno de los más
bellos y de mayor atracción turística del país, situado a ocho quilómetros
aguas abajo de Fray Bentos, será el principal perjudicado. ¿Quién va a
veranear a un lugar donde hay olor a huevo podrido? ¿Quién se va a
bañar en las aguas de una playa sobre la cual se volcarán diariamente miles
de litros de sustancias químicas peligrosas para la salud, en
particular los ya conocidos contaminantes orgánicos persistentes (COP)? Los
puestos de trabajo que se perderán en esa área turística todavía no han
sido evaluados pero sumarán una cifra sin duda relevante.

Dicho sea de paso, al permitir la instalación de las celulósicas el
gobierno violará los acuerdos internacionales que el propio país firmó,
como la convención de Estocolmo para reducir la emisión de dioxinas y
furanos. Uruguay, a contrapelo del mundo, aumentará la emisión de esas
sustancias.

Pero no sólo el turismo de Fray Bentos se verá resentido, también el de
todo el país y en particular el de la costa Este, porque ya la imagen
de “Uruguay Natural” ha quedado muy deteriorada por todo este asunto y
la obcecada negativa del gobierno uruguayo a escuchar la protesta de los
ambientalistas argentinos y las advertencias de los ambientalistas
criollos ha causado enormes perjuicios a las posibilidades turísticas del
país, en particular la de los años venideros. El turismo representó en
el año 2005 un alto porcentaje del total de ingresos de divisas al país,
de modo que poner en riesgo la continuidad de esos ingresos es atentar
contra la economía del país y contra los intereses del país mismo.

Pero lo más grave es que si el gobierno mantiene su tozuda posición se
corre el riesgo de que el conflicto con Argentina se agrave al punto de
poner en cuestión las relaciones comerciales con uno de los principales
mercados compradores de nuestra producción exportable.

(La gremial uruguaya de transportistas, junto a sectores exportadores,
anunció recientemente que el país ya perdió más de treinta millones de
dólares a raíz de este conflicto. ¿Hasta cuando el gobierno uruguayo
seguirá manteniendo una posición que conduce a nuestra economía y al país
a situaciones críticas y ruinosas?)

En aras de la defensa de una posición favorable a las celulósicas
-insostenible, a esta altura- se pone en riesgo uno de los principales
soportes de la economía del país: la exportación al mercado argentino. No
debemos olvidar que las campañas de boicot a determinados productos o
marcas, que suele emplear como método de lucha la organización ecologista
Greenpeace, suelen dar buen resultado y afectar grandemente el consumo
de tales mercaderías. ¿Vale la pena exponernos a ese riesgo, que ya es
una realidad en puerta?

Por otra parte, cuando nuestra etiqueta internacional “Uruguay, País
Natural” pierda confiabilidad ante los consumidores internacionales, el
turismo se resienta y el mundo comience a dejar de comprar nuestros
productos, no digo árboles, sino carne, cueros, lana, lácteos, cereales o
cualquier otro producto “natural”, ¿qué le va a decir este gobierno a la
gente? ¿Ajo y agua?

Si la instalación de esas plantas trae tantos problemas y tan pocos
beneficios, por qué razón nuestros gobernantes siguen empeñados en
apoyarlas. ¿Los frenteamplistas no se han preguntado por qué los principales
dirigentes políticos del Partido Colorado y del Partido Nacional apoyan
al gobierno en este tema en forma casi más fanática que los propios
militantes de izquierda?

Claro, tampoco parecen haberse percatado de que se ha montado una gran
parafernalia mediática a favor de las plantas, diligente para
descalificar cualquier opinión contraria, identificando el asunto como si fuera
una causa nacional, en un bombardeo permanente que hace recordar la
metodología goebbeliana en materia informativa.

No es porque esto beneficie al país, es porque tales organizaciones
políticas están involucradas con el modelo forestal, en particular Lacalle
y compañía y por eso el dirigente herrerista ha manifestado su apoyo
incondicional a Vázquez en este asunto. ¿En qué se fundamenta, entonces,
la postura del gobierno? (Véase recuadro).

Una punta del ovillo por donde empezar a comprender semejante embrollo
parece ser el hecho de que buena parte del sector profesional uruguayo
-abogados, médicos, escribanos, arquitectos y otros profesionales-, así
como otros sectores de clase media y alta (bancarios y banqueros)
realizaron en el pasado reciente grandes inversiones en forestación y ahora
presionan al gobierno para que favorezca la instalación de las plantas,
lo que le daría una salida rápida, segura y económica -sin el costo de
los fletes- a los miles de árboles que ocupan hoy buena parte del
territorio nacional.

Es sabido que en los años 80 y 90 muchos profesionales universitarios
invirtieron en forestación. Es paradigmático el caso de las cajas de
profesionales, de notarios y de bancarios, las cuales poseen grandes
extensiones forestadas. Ya es conocido el hecho de que el gremio bancario
(AEBU) apoyó un acuerdo entre Botnia y la Caja Bancaria para que esta
institución provea de madera a la transnacional finlandesa. Si a esos
antecedentes le sumamos que algunos izquierdistas todavía sostienen el
ilusorio sueño de volver al pasado industrialista, con muchas fábricas
echando humo por sus chimeneas y con el crecimiento del proletariado
industrial como columna vertebral de una futura revolución social, entonces
uno puede empezar a comprender por qué en la izquierda son muy pocos los
que cuestionan esta nueva barbarie a la cual el imperio nos quiere
someter y que el gobierno frenteamplista más que tolera, apoya con
inusitado fervor.


RECUADRO – La coima, el tiburón y la sardina

A pesar de que el canciller uruguayo ha sostenido que nuestro gobierno
no acepta coimas, sugiriendo en forma elíptica que sí lo habrían hecho
las autoridades argentinas, de haberse dado la oportunidad, es
innegable que todos los partidos políticos uruguayos con representación
parlamentaria (incluido el Frente Amplio) ya aceptaron el dinero que las
empresas Botnia y Ence pusieron arriba de la mesa para financiar los viajes
de un nutrido grupo de parlamentarios al viejo continente, quienes
viajaron con todos los gastos pagos con la excusa de ir a inspeccionar las
celulósicas en sus respectivos países.

Lo real es que hay mucho dinero de por medio, que estas empresas no
escatiman en financiar gigantescas campañas publicitarias a su favor ni en
apelar al medio que sea para ganar adeptos, y que la compra de
conciencias está en el orden del día. Hasta han llegado incluso a organizar
fiestas masivas y regalar toneladas de juguetes y artículos escolares en
los barrios pobres de Fray Bentos para captar la simpatía de la opinión
pública. Si uno no fuera tan crédulo podría llegar a pensar que se
trata de demagogia pura.

Recientemente se denunció que la empresa Botnia pagó algo más de cuatro
mil dólares a un dirigente ambientalista fraybentino para que actuara
solapadamente entre los ambientalistas uruguayos con el objetivo de
frenar las manifestaciones contrarias a la instalación de las plantas, e
influyera en la asamblea ciudadana de Gualeguaychú para promover un
ámbito de entendimiento entre las partes. Los directivos de la empresa
reconocieron públicamente que le habían entregado al fulano solamente 50 mil
pesos para que se encargara de tales gestiones, pero negaron que
semejante conducta pudiera ser calificada de coima.

Pero aunque absolutamente todos los miembros del plantel gobernante
fueran tan ingenuos como impolutos, hay algunos hechos que no pueden
negarse: porque es innegable que la actual postura del gobierno en esta
materia es absolutamente funcional a los intereses de los Estados Unidos.
Es evidente que un Mercosur fuerte conspira contra los planes
hegemónicos del imperio. Sobre todo con el acople de Chile, Bolivia y Venezuela,
lo que conformaría un poderoso bloque no sólo ya económico sino también
político que, a corto y a mediano plazo, podría convertirse cuando
menos en una gran incomodidad para el gigante del norte. Por eso Estados
Unidos arremete con el ALCA y por eso, a los fines de su estrategia,
resulta funcional que el Mercosur se debilite, que no avance. En ese marco,
la polémica por las plantas de celulosa y la grieta cada vez más agria
en las relaciones entre Argentina y Uruguay acumula para los intereses
estadounidenses y va en contra de los intereses de nuestras naciones.
No es casual, entonces, que algunas voces del gobierno comiencen a
hablar en forma favorable a un eventual tratado bilateral de libre comercio
con Estados Unidos. Se cumple la vieja ley; el pez grande se come al
chico.

PD: el flamante anuncio del presidente Vázquez en la propia sede del
imperio, sobre el inminente alejamiento de Uruguay del MERCOSUR, no hace
más que confirmar una triste sospecha: el viejo imperio sigue mandando,
aunque la gente haya votado por el cambio y el socialismo. Una vez más
los hechos convocan a no cejar en la lucha por los viejos sueños.

Walter Falco
Montevideo, 1 de mayo de 2006.

sábado, mayo 06, 2006

!Uruguayos,uruguayos! ¿Dónde fueron a parar?


Ayer recibí una carta,
directa de Neva York,
de mi amigo el Horacio,
trabaja de soldador.
Allí tiene cola chata,
alfombra y calefacción,
parece cosa de locos,
le va cada vez peor.
(Jaime Roos,Los Olímpicos, canción a la que también pertenece la frase que da título a este artículo).

Uruguay es un país entrañable para muchos argentinos entre los que me cuento.
Quizás por ser los vecinos mas próximos, y los mas próximos en todo, aunque seamos distintos en muchas cosas.
Próximos en haber compartido una historia.En haber recibido a la misma inmigración, desde los mismos lugares.
Atractivo para nosotros por haber preservado al menos en una pequeña parte la herencia africana que nosotros perdimos totalmente, mas allá de que sus "próceres" exterminaron a sus pueblos originarios de manera total, superando el triste récord de "nuestro" Julio Argentino Roca.
Uruguay ha sido también el hogar de muchos exilios argentinos de los mas diversos signos, desde la lejana época de la guerra entre Unitarios y Federales, pasando por todas las mas diversas contiendas del siglo XX que alejaban a alguno de los contendientes a la vecina orilla.
También por ser ese país "tranquilo" y "cercano" de gente extremadamente amable, con una capital que comparte el mismo río que la nuestra. Ese río que de aquella márgen no aparece tan maltratado como de ésta.
Salvo por los fubolístico, el uruguayo, para muchos de nosotros, es el pueblo extranjero que mas amamos.
También ha sido el hogar de luchas cívicas, y experiencias culturales que siempre miramos con mucho respeto en un caso, y disfrutamos mucho en el otro,unas y otras en muchos casos de la mano.
Desde Onetti y su complejidad a Benedetti y su simpleza, hasta las lecturas infantiles y escolares de Juana de Ibarbourou,pasando por las siempre eternas "Venas abiertas de América Latina"de Eduardo Galeano, muchos de sus escritores siempre resultaron de nuestro afecto.
Ni que hablar de muchos de sus extraordinarios músicos, que según sus propias palabras siempre fueron mas apreciados en esta márgen del Río de la Plata, que en aquella donde nacieron.
Testimonian lo que digo desde Alfredo Zitarrosa, el Sabalero, o los Olimareños, en el folklore, o Julio Sosa en el tango,hasta los excelentes Hugo y Osvaldo Fattoruso desde los Shakers hasta ahora, el queridísimo Rubén Rada, los mas recientes Jorge Drexler y Fernando Cabrera,el siempre marginado pero genial Eduardo Mateo,y por supuesto Jaime Roos, por sólo nombrar a algunos, en otras expresiones musicales populares mas contemporáneas.
Uruguay había tenido desde hace mucho tiempo ya, una Central obrera el PIT_CNT , combativa y honesta, distante por demás de nuestros "gordos" de la CGT, y una continuidad democrática interrumpida una sóla vez en su historia, a diferencia de nuestra accidentada historia de golpes de Estado.
Tenía, y tiene,dos partidos tradicionales que nunca abandonaron el folklore que arrastran desde la guerra civil del siglo XIX:los blancos,y los colorados, dos opciones que con el tiempo se volvieron más y más conservadoras y similares entre sí.
Los colorados, los herederos de los "federales", eran los porta estandartes del "populismo" uruguayo por la vía de una mezcla de Perón e Yrigoyen llamado José Battle y Ordóñez que por haberle dado algo al pueblo al principio del siglo XX, permitió que otros de sus mismo apellido gobernasen hasta nuestros días, entre otros su penúltimo y patético Presidente. Estos populistas sin embargo aparte de ser cada vez mas conservadores han aportado muchos nombres a la única dictadura militar de la historia uruguaya.
Del otro lado los blancos,herederos de los unitarios, mas elitistas y conservadores desde siempre, con mas tiempo en la oposición también.Los blancos que se oponían a que el primer Battle ordenara instalar un "liceo" (Colegio Secundario) en cada pueblo,y que afilaron en los 50 al uruguay al Fondo Monetario,pese a la oposición.según se dice, de los "colorados", fueron sin embargo mas dignos en la oposición a la dictadura militar del 73.
Colorado, de Peñarol, y de apellido italiano,Blanco, de Nacional, y de apellido español, parecía un clásico inamovible de la realidad uruguaya,tan aparentemente digna y "cívica" en muchos aspectos, pero tan latimoamericana e injusta en otros.
A esa inamovibilidad parecía que la rompía una novedosa criatura: el Frente Amplio, y un grupo guerrillero que luego se volvió una opción política más, integrada al Frente Amplio: los "Tupamaros", respetados aún por sus detractores.
Raúl Sendic, fue despedido en su entierro por 50.000 personas en un país de tres millones. El aprecio y respeto que siempre mereció Sendic aún de parte de los que disentían con él están muy lejos de la opinión que merecen nuestros Firmenich y Galimberti en la mayoría de los argentinos(y que se han sabido ganar), o de la demonización o el ninguneo del que han sido objeto muchos otros de nuestros ex guerrilleros, de muy distinta ética aunque se disienta con ellos.
El Frente Amplio fue una creación de la tradicional izquierda oriental de comunistas y socialistas que decidió ampliarse hacia otras opciones mas cercanas al centro del espectro político,mas figuras que habían tenido orígen en los tradicionales "blancos" y "colorados".
Para mas datos, los frenteamplistas lograron captar como líder,ícono, y candidato a Presidente a un general proveniente del coloradismo :Líber Seregni.
El debút electoral del Frente Amplio fue promisorio, y seguía de cerca la experiencia de la Unidad Popular de Chile. Dicen algunos que hubo un colosal fraude que les restó votos y les dio el triunfo a los colorados.
En aquellos momentos, cuando los colorados sentaban en la Presidencia a un troglodita de ultra derecha llamado Pacheco Areco, el accionar de los Tupamaros se intensificaba.
Algo de ésto reflejaba la película "Estado de Sitio" de Costa Gavras.
Luego de Pacheco viene Bordaberry, otro colorado facho, que se termina dando un autogolpe, para iniciar la dictadura militar en Uruguay.
Vendrá la cárcel, el exilio político y económico, y aquella famosa frase "el último que apague la luz".
Liber Seregni soporta con entereza y dignidad la tortura, y también Sendic. Esta persecución común los unifica.
Cuando retorna la democracia, la mayoría de los ex tupamaros se incorporan al Frente Amplio bajo el manto de la agrupación "26 de marzo".
Allí el Frente empieza a crecer, y basándose en la apelación a la democracia directa, muy desarrollada en la Constitución uruguaya, via plebiscito van también siendo partícipes de lo que parecía un proceso de creación de conciencia y de maduración en la sociedad uruguaya.
El prestigio del Frente Amplio, cuando el muro de Berlín caía, los lleva a la intendencia de Montevideo.
Esta vez de la mano de un carismático líder llamado Tabaré Vázquez, con un Líber Seregni ya viejo, y que progresivamente se va retirando.
Sin embargo, poco ántes la sociedad oriental nos había dado la primer sorpresa desagradable, cuando en un referédum votan a favor de la llamada "Ley de Caducidad", en todo el país salvo Montevideo que vota por la negativa, una norma que en la práctica anmistiaba a los responsables de los crímenes ejecutados desde el poder durante el período dictatorial.
Silveras el mas famoso torturador oriental, siempre pudo caminar tranquilamente por las calles de Montevideo, a diferencia de su símil argentino Alfredo Astiz.
La gestión frente amplista de Montevideo es elogiada. La descentralización y el carácter participativo parecían hacer reales algunas de las cuestiones que postula el catalán Jordi Borja.
Es entonces, en los 90, durante el auge menemista en la Argentina, cuando en Uruguay se encontraba a una sociedad que se resistía a las privatizaciones, y no se dejaba seducir por los espejitos de colores que destruyeron a la Argentina.
Los gobiernos neo-liberales blancos y colorados, fracasaban una y otra vez en sus intentos privatizadores.
Cuando se leían entonces, las consignas que adornaban las paredes de Montevideo, parecía que allí los 70 nunca se habían ido. Cuando se escuchaban las discusiones entre uruguayos aún respecto de artistas populares, se prescindía de su calidad, y se valoraba su pertenencia política como sucedía entre nosotros en los 60 y 70.
Pero no toda era tan simple.
En el Frente Amplio la mayor parte de la militancia la poseía el izquierdista 26 de marzo, pero la mayor aceptación de parte del establishment y de la sociedad lo tenía su tendencia mas de derecha:Asamblea Uruguay del actual Ministro de Economía Danilo Àstori.
Uruguay llamada la "Suiza de América" no sólo lo era por su "civismo institucional", sino también por la utilización del secreto bancario que ocultaba muchas fortunas mal habidas de corruptos de esta orilla.
Punta del Este en el verano, se transformba, y se transforma, en un antro adonde suele concurrir lo peor de la Argentina exhibierndo obscenamente frivoolidad y poder.
También Uruguay quería ser no Suiza, pero sí tal vez Bélgica u Holanda, por el rol que jugaba en el Mercosur, como sede de toda la estructura burocrática y fiel de la balanza entre los dos gigantes del barrio.
Entonces llega Tabaré Vazquez al poder, y llegan las pasteras a Fray Bentos.
Y son ahora los Ururguayos los que parecen los argentinos de los 90, seducidos por los espejitos de colores.
Resulta que apelando a viejas cuestiones de "anti porteñismo" se adoptan políticas que avergonzarían a Artigas, el principal luchador contra el centralismo porteño.
Lo peor de todo, es que eso lo hace un gobierno del Frente Amplio, esgrimiendo un discurso que parece el de Carlos Ménem, con una diferencia.
Menem aparecía en el centro de la escena, Vazquez habla después de los ex Presidentes Sanguinetti,Lacalle, y Battle, que parece que le estuvieran indicando todo lo que tiene que hacer, dando una imágen mas próxima a la de De la Rúa.
Amigos uruguayos ¿Qué ventaja creen que les daría un acercamiento con Estados Unidos? ¿No hemos sido nosotros ejemplo suficiente?.
Compañeros del Frente Amplio ¿Cómo es posible que ejercieran el poder mucho más cuando estaban en la oposición que ahora que están en el gobierno?
Como diría Jaime Roos Uruguayos, uruguayos ¿Dónde fueron a parar?